Falling
Enfriamiento o gripe, me han dado una tregua temporal de la vida. Dormidos libido y apetito, la apatía ocupa todo y me rindo a los best-sellers. Aunque sé que mañana todo continuará, en este instante casi nada tiene sentido. Aquí encerrado, la calle, la gente, no son más que una ilusión. Un beso de chocolate me devuelve a la realidad. Pero me quedo solo y rozo la frontera. Algunos que la cruzan ya no vuelven. De contribuyente a dependiente. Está oscuro y hace frío. Y ya no huele a nada. Las flores a punto de marchitarse.
Débiles. Somos débiles a pesar de máscaras y armaduras. La primera debilidad es la fragilidad del cuerpo. La segunda, prima-hermana de la primera, es la fragilidad de las emociones. Todo sustentado en una precaria estructura que al menor síntoma de cambio climático se derrumba. También emitimos CO2 invisible que puede minar nuestras relaciones. En este caso el resultado a largo plazo es enfriamiento. Hace frío.
Etiquetas: relaciones humanas
4 comentarios:
que familiares me suenan tus palabras.... el estado de baja es algo surrealista.... sobre todo si se alarga....
que te recuperes pronto y mucho ánimo...
besos
¡vaya! debiste tener mucha fiebre... ¿estás mejor?, ¡manito, levanta el ánimo! traga parancetamol o toma ibuprofeno, lo primero pal dolol, y ¡a vivir con desenfreno!
Convaleciente??? ayyy, si es que no me contáis nada ¡¡no puede ser!!
Espero que estés recuperado apra el finde y que nos veamos.
Besos!!!, aspirinas y muhcos mimos
Creo que somos mas débiles de espíritu que de cuerpo. El afecto y la emoción son mas frágiles que la carne, aunque esta sea mas fácil de calmar en su fiebre.
Publicar un comentario
Suscribirse a Enviar comentarios [Atom]
<< Inicio